Se conocieron en un congreso de bioquímica celebrado en Berlín y enseguida congeniaron. Las evoluciones de la ciencia los reunió durante años en otros congresos internacionales donde también se hablaba, con mayor o menor libertad, con información realista o hipótesis de trabajo en paralelo, de todo cuanto afecta a los seres humanos sin distinguirlos por su capacidad intelectual, valoración pública, compromiso, ámbito profesional o lugar de residencia. La buena sintonía entre ambos se mantuvo desde aquel primer ya lejano encuentro. Una frecuente correspondencia los situaba en la proximidad pese a la distancia de miles de kilómetros y otros obstáculos que fueron ganando protagonismo a la par que remitía la anterior fluidez en el contacto. Las informaciones y experiencias que intercambiaban como la cosa más natural del mundo en su condición de científicos reputados y calidad de amigos, en el canal privado de pronto comenzaron a manifestarse si no contradictorias si un ta...
El Imperio en Asia: las misiones y crónicas del agustino Martín de Rada Al misionero agustino, embajador, tratadista y cartógrafo Martín de Rada Cruzat, nacido en la capital navarra, Pamplona, el año 1533, se le considera el primer sinólogo (especialista en las lenguas y culturas de China) de la historia. Siendo un adolescente, sus padres lo enviaron junto a su hermano Juan a la Universidad de París para estudiar griego y ciencias exactas, físicas y naturales, disciplinas a las que Martín agregó la matemática, geografía y astronomía. Finalizado el periplo parisino, continuó su aprendizaje en la Universidad de Salamanca. En esta época de intensa actividad intelectual le llegó la vocación religiosa, a la que satisfizo ingresando en la Orden de los Agustinos el año 1554; en la universidad salmantina inició los estudios teológicos, prosiguiéndolos en Toledo. En 1560 Martín de Rada eligió la práctica misionera en el Nuevo Mundo, embarcándose e la nao Trinidad q...