Sí, pero no.
Es como una verdad a medias.
Es, pero no está.
No es lo mismo, aunque mitiga la ausencia y compensa el tedio de la espera.
Porque está seguro de que volverá.
Francis Barrand: La voz de su amo (1899).
Ten paciencia.
Feliz tú que soportas el paso del tiempo sin contar las horas o los días.
Admiro tu perseverancia: si no es ahora será después. ¿Quién puede negarte esa dadivosa certeza? Estoy contigo, voy aprendiendo.
Todo llega para quien sabe esperar, y puede que aún mejor de lo vivido y de lo imaginado.
Eres fiel y constante. Mereces la recompensa.