La ceremonia es mirarlo, y de la imagen deducir su valor intrínseco con independencia de los materiales empleados para dotar al objeto de una calidad excepcional, vinculada al trato, dependiente del uso.
Trono tallado en madera procedente del Palacio Real de Dahomey. (Museo Ifán, Dakar).
Poltrona que nadie quiere dejar, a no ser que el muelle sustento sea trocado por otro mejor, previo acuerdo o por disputa vencida, ampliando los beneficios, conservando los márgenes, administrando las distancias.
Trono de aventuras épicas y de sórdidas confabulaciones, labrado por los útiles del cargo con pátinas y barnices según el estado de la cuestión, la que rige, gobierna, la que intercede, condena, exime, la que negocia, juzga y procede.
Asiento de presidencias, butaca de estrado, jerarca de lunetas; dilecto consejero que habla con voz de abajo arriba y de atrás adelante en privado y en público, de día y de noche cerrada o abierta; recamado de historia con prólogo y epílogo, de leyenda surtido y, alguna vez, pero pocas y apenas sabidas, hasta albacea testamentario de últimas voluntades dictadas a la conciencia.
Consulta en horario lectivo de audiencia a concilio y de estado de sueño a estado de vigilia.