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Descubrimiento y primeras exploraciones de las islas Palaos

El Imperio en el Mar del Sur: La búsqueda de las islas Palaos

A finales del siglo XVII se tuvo noticia en Filipinas por dos embarcaciones indígenas desde allí arribadas de la existencia de unas islas llamadas Pais o Palaos. Para descubrirlas, el gobernador español Fausto Cruzat y Góngora envió dos pequeñas armadas en 1708 y 1709; pero nada encontraron en la latitud de las islas Marianas, donde se creía pudieran estar.

    Francisco Padilla

Imagen de spanishlake.blogspot.com

El jienense de Úbeda, Francisco de Padilla, nacido aproximadamente en 1671, había embarcado en la armada de Miguel de Elorriaga, navegando durante seis meses con duros temporales. Retornados a Manila informaron de la ausencia de tales islas.

    Un año después, 1710, Francisco de Padilla recibió el mando de la balandra San Miguel y el patache Santísima Trinidad, flota con la que se le ordenó intentar de nuevo la localización de las islas Palaos, pero esta vez tomando rumbo Sureste acordado por una junta de pilotos; se buscarían las islas en las proximidades de Nueva Guinea. En septiembre de 1710 zarparon de Manila los dos barcos; aunque por las malas condiciones del mar la balandra se perdió antes de abandonar el archipiélago filipino.

    Rescatados los supervivientes y puestos a seguro, Padilla continuó la travesía aprovechando los vientos monzónicos. Ganando latitud sur, el 30 de septiembre a 181 leguas del cabo Espíritu Santo descubrió dos pequeñas islas pertenecientes al grupo de las Palaos, llamadas por los nativos Sonsorrol, que los españoles bautizaron de San Andrés. Fueron recibidos amigablemente, por lo que desembarcaron dos religiosos y doce marineros en vista a establecer un asentamiento.

    A la espera de resultado, el patache Santísima Trinidad, sufrió el empuje de una corriente muy fuerte que lo desplazó hasta las inmediaciones de otra isla, de mayor tamaño. Pero los habitantes de la misma los recibieron con hostilidad impidiendo cualquier trato. Padilla decidió regresar a San Andrés a recoger a los españoles que pusieron pie en tierra y volver a Manila con la información del hallazgo y sus consecuencias primeras; pero de los religiosos y marineros no hallaron rastro alguno.

Imagen de spanishlake.blogspot.com

El capitán y piloto español Bernardo de Egoy y Zabalaga, que había reconocido y descubierto alguna isla en el archipiélago de las Carolinas, en 1792 llevó a cabo una campaña de reconocimiento por los grupos insulares de Palaos y Ulithi (atolón en las islas Carolinas) con el patache Santo Domingo, y asimismo de otras islas próximas.

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