Familiarizado con el transporte por carretera y los motores de los vehículos desde la infancia, pues en 1927 su padre había adquirido la línea de autobuses que cubría la ruta de veinte kilómetros entre Orense y Los Peares, Eduardo Barreiros Rodríguez, nacido en la localidad orensana de Gundiás el año 1919, empezó a trabajar en la empresa familiar desde la base, primero como revisor y después como mecánico, hasta que en 1945 la familia vendió la línea y él optó por adentrarse en las obras públicas; aunque momentáneamente, pues retornó a la actividad mecánica, que le apasionaba, especializándose en la transformación de los vehículos industriales soviéticos utilizados en la guerra. Fue exitoso el procedimiento de transformación a diésel de esos motores primarios, de modo que en 1951 lo patentó. Al año siguiente se trasladó a Madrid. En la capital de España constituyó junto a sus hermanos el año 1954 la sociedad anónima Barreiros Diesel con el propósito de explotar el mot...
El blocao era una instalación militar de vigilancia, a modo de fuerte improvisado, de pequeña o mediana dimensión, situada en zona predominante del terreno con interés estratégico y defensivo, edificado con piedras, troncos y sacos terreros, en diferente proporción, y rodeado por una alambrada. Los que menos agrupaban a un cabo y cuatro soldados, los que más, y según la exigencia inmediata, podían albergar a una o dos secciones. Blocao el malo . Blocao de la muerte Corría septiembre de 1921 cuando el ejército español inició la reconquista del territorio perdido tras el llamado desastre de Annual. Llegaron a la Comandancia general de Melilla con las unidades encargadas de la decisiva tarea la flamante Primera Bandera de La Legión. En la ladera este del imponente macizo del Gurugú, dominador por la vista y altura de la plaza de Melilla, el Atalayón y la Mar Chica, se erigía modesto y frágil el blocao de Dar Hamed enfilado por el enemigo rifeño apostado en el barr...