Nacido en Málaga el año 1902, Fernando Rein Loring mostró desde niño su espíritu aventurero y deportista. Aunque curso estudios de perito electricista, su vocación aérea lo convirtió en piloto civil en la década de los años veinte. Con el título en la mano ingresó como soldado voluntario en el Cuerpo de Ingenieros, en la escala de Complemento, en la que alcanzó el empleo de sargento en 1924. Habiendo solicitado prestar servicio en la Aviación, fue asignado al curso de Ametrallador-bombardero en el aeródromo murciano de Los Alcázares; y cuando aprobó el curso quedó encuadrado en la 7.ª Escuadrilla del 2.º Grupo de las Fuerzas Aéreas de África, dotada con aviones Breguet XIV y estacionada en el aeródromo de Sania Ramel, en Tetuán.
En esta fase bélica de las Campañas de Marruecos, Rein Loring fue ascendido a suboficial por méritos de guerra; curado de las heridas en combate, siguió ofreciéndose como voluntario para cumplir las misiones más arriesgadas. Obtenido el título de piloto militar en 1926, fue su último destino en África el 3.º Grupo, también en Tetuán. A finales del año en curso pidió la licencia y recibió la Cruz de María Cristina por su comportamiento en campaña.
Entonces dio inicio la etapa civil de su carrera aérea. Piloto de C.E.T.F.A. durante seis años, empresa dedicada a la fotografía aérea, colaboró con el Instituto Geográfico y Catastral suministrando imágenes de toda España para la confección del Mapa Nacional a escala 1:50.000.
Primer vuelo de Madrid a Manila
Con la avioneta Loring E-II, bautizada con el nombre de La Pepa, de diseño y construcción nacionales, provista con un motor Kinner K5 de 100 c.v., sin apoyo oficial despegó en solitario del aeródromo madrileño de Cuatro Vientos el 24 de abril de 1932 para llegar a Manila, capital de las islas Filipinas, el día 11 de julio, habiendo recorrido 15.615 km. Por este vuelo se le concedió la Medalla Aérea. Durante el vuelo soportó violentas turbulencias sobre el desierto arábigo, peligrosas fugas de combustible y otras averías mecánicas, unido a problemas diplomáticos y vientos fuertemente contrarios en el mar de China. En Hong Kong debió esperar dos meses un permiso especial para hacer escala en Formosa. Durante este lapso coincidió con un piloto australiano que volaba de Londres a Australia con una avioneta Comper Swift, aparato que le impresionó por su tamaño y características al punto de elegirlo para su segundo vuelo de Madrid a Manila.
Las trece etapas del vuelo:
Madrid-Málaga, 420 kilómetros.
Málaga-Argel, 750 km., y Argel-Túnez, 650 km. Total: 1.400 kilómetros.
Túnez-Trípoli, 650 km., y Trípoli-Bengasi, 850 km. Total: 1.500 kilómetros.
Benasí-El Cairo, 1.120 km., y el Cairo-Gaza, 350 km. Total: 1.470 kilómetros.
Gaza-Bagdad, 960 kilómetros.
Bagdad-Bushire, 800 km, y Burshire-Lingeh, 500 km. Total: 1.300 kilómetros.
Lingeh-Jask, 380 km., y Jask-Karachi, 960 km. Total: 1.340 kilómetros.
Karachi-Jodhpur, 620 km., y Jodhpur-Allahabad, 880 km. Total: 1.500 kilómetros.
Allahabad-Calcuta, 740 km., y Calcuta-Akyad, 650 km. Total: 1.390 kilómetros.
Akaya-Rangún, 520 km., y Rangún-Bangkok, 640 km. Total: 1.160 kilómetros.
Bangkok-Hanoi, 975 kilómetros.
Hanoi-Hong Kong, 900 kilómetros.
Hong Kong-Aparri, 900 km., y Aparri-Manila, 400 km. Total: 1.300 kilómetros.
Segundo vuelo de Madrid a Manila
En el aparato bautizado con el nombre Ciudad de Manila, con motor Pobjoy R de 80 c.v., esta vez con ayuda oficial, de nuevo en solitario, partió del aeródromo madrileño de Getafe el 18 de marzo de 1933 para aterrizar en Manila el 10 de abril, tras recorrer 15.130 kilómetros y volado 82 horas y 40 minutos. La ruta fue similar a la anterior, y aunque menores las dificultades, a causa del mal tiempo. se vio obligado a permanecer diez días en la ciudad indochina de Thekek.
En ambos vuelos exitosos, el recibimiento en Filipinas fue de enorme entusiasmo, con aclamaciones para el audaz piloto y vítores a España.
Las once etapas del vuelo:
Madrid-Túnez, 1.460 kilómetros.
Túnez-Bengasí, 1.510 kilómetros.
Bengasi-El Cairo, 1.100 kilómetros.
El Cairo-Bagdad, 1.250 kilómetros.
Bagdad-Jask, 1.710 kilómetros.
Jask-Jodhpur, 1.580 kilómetros.
Jodhpur-Calcuta, 1.620 kilómetros.
Calcuta-Rangún, 1.170 kilómetros.
Rangún-Lhankon (Thekek), 1.260 kilómetros.
Lhankon-Hong Kong, 1.330 kilómetros.
Hong Kong-Manila, 1.140 kilómetros.
De regreso a la patria se sucedieron los homenajes y las distinciones por su voluntad inquebrantable, su gran preparación, su probada destreza, decisión, coraje y competencia técnica.
Fernando Rein Loring
En otro orden de cosas, Fernando Rein Loring fue Jefe de Pilotos de Iberia y recibió el segundo Distintivo en el Tráfico Aéreo al sobrepasar los dos millones de kilómetros. La Medalla Aérea que le fue otorgada premiaba además de sus dos vuelos —raids en la terminología aérea internacional– de Madrid a Manila, las treinta y seis travesías que efectuó sobre el Atlántico Sur.