Campañas de Marruecos en el siglo XX: Protección de un convoy a la posición de Tizi Azza
5 de junio de 1923
Protegiendo un convoy a Tizi Azza y estando al mando del carro de asalto n.º 9, se le ordenó avanzar sobre las trincheras enemigas. siendo recibido con nutridísimo fuego consiguiendo, no obstante, desalojarlas causando numerosas bajas.
Una vez alcanzado el objetivo propuesto por el mando, y ya rebasada la línea de trincheras, ordenó al conductor que hiciese alto con el doble propósito de evitar el consumo de combustible y hacer fuego con mayor precisión contra un grupo de moros parapetado en un morabito. Apenas iniciado el fuego, un proyectil disparado a muy corta distancia penetró por la mirilla de la torre desde la que el sargento García Esteban observaba al enemigo., produciéndole heridas que le causaron en el acto la pérdida del ojo derecho y una grave lesión en el izquierdo, con pérdida total de la vista.
Sobreponiéndose al intenso dolor y conservando la imagen y situación del enemigo, demostrando una fortaleza de espíritu y una abnegación difícilmente igualable, continuó disparando por ráfagas hasta consumir toda la munición de la ametralladora para evitar el efecto moral que hubiera proporcionado al enemigo si el carro cesaba en el fuego. Finalmente regresó a la segunda línea desde la que el sargento García Esteban fue evacuado.
En el combate del 5 de junio de 1923, se le propuso para el ascenso y para la Medalla Militar, que le fue concedida “por su brillante actuación en el combate librado para abastecer Tizi Azza, en el que tomó parte como ametrallador del equipo del carro blindado n.º 9, y al ser gravemente herido en los dos ojos por proyectil enemigo, pediendo la vista, y a pesar del intenso dolor que le causaban las heridas, ordenando al cabo conductor seguir el avance hasta alcanzar el objetivo, continuó disparando la ametralladora para evitar que la moral del enemigo aumentara al suponer al carro fuera de combate.”
En 1928 recibió la Medalla Militar y la Cruz Laureada de San Fernando.
Mariano García Esteban paso al Cuerpo de Inválidos en 1924, ya ciego, alcanzando el empleo de general de brigada con antigüedad de 1960. Falleció en su Teruel natal (localidad de Báguenas), en 1971. Había nacido en 1894.