El físico y matemático Julio Palacios Martínez, nacido en la localidad zaragozana de Paniza el año 1891, fue un científico de relevancia nacional e internacional.
Licenciado en Ciencias Físicas y en Ciencias Exactas y catedrático de Termología en España, el profesor Blas Cabrera, eminente físico, le aconsejó que ampliase estudios en la universidad holandesa de Leiden, donde estudió las isotermas a baja temperatura correspondientes a los gases nobles. Finalizado el periplo exterior de dos años, desde 1916 a 1918, Julio Palacios se incorporó al equipo de Blas Cabrera en el Laboratorio de Investigaciones Físicas de la Junta de Ampliación de Estudios e Investigaciones Científicas (JAE), para investigar junto a Miguel Catalán Sañudo y Arturo Duperier, entre otras figuras científicas nacionales, la tensión superficial del mercurio y la corrección correspondiente de las lecturas barométricas, y el flujo de gases en tubos capilares, introduciendo una notable modificación en las bombas de difusión de Langmuir, que publicó en los Anales de la Real Sociedad de Física y Química en 1920; a la par que investigaba sobre la teoría de la luminosidad en los rayos canales, publicando sus estudios en Annalen der Physik el año 1924, y colaborando con Blas Cabrera en los estudios sobre el paramagnetismo y el diamagnetismo.
Sus trabajos obtuvieron gran repercusión internacional, de modo que una institución prestigiosa como la Fundación Rockefeller patrocinó en España el Instituto Nacional de Física y Química, dotándolo del más moderno equipo material. Allí Palacios dirigió la sección de rayos X, que incidió en la investigación sobre las estructuras cristalinas por difracción, logrando crear una genuina escuela española en ese campo.
Julio Palacios Martínez
Imagen de rae.es
Otros aspectos de su actividad científica lo situaron experimentando con la termodinámica de gases a muy bajas temperaturas, electroquímica, óptica fisiológica, magnetismo, física nuclear, biofísica, y un estudio crítico sobre la teoría de la relatividad de Albert Einstein postulando un retorno a las nociones clásicas de tiempo y espacio absolutos. Publicó un número aproximado de doscientos artículos de investigación, aproximadamente una docena de monografías y textos universitarios y su famoso Análisis Dimensional que tuvo un gran impacto en Europa.
Fue vicerrector de la Universidad de Madrid y vicepresidente del Instituto de España, cargo que consignaba a la figura científica con más autoridad en España. Desde su alto cometido impulsó una organización eficiente de las Reales Academias y de la Real Sociedad Española de Física y Química, así como la transformación de la JAE en el Consejo Superior de Investigaciones Científicas.
Ingresó en la Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales el año 1932, con un discurso sobre Mecánica Cuántica.
De los años cuarenta en adelante la actividad científica, pedagógica e intelectual de Julio Palacios continuó recibiendo impulso, mayores distinciones y un abanico de aspectos que incluyeron la rotación de un sólido libre, los fenómenos electrolíticos, una interpretación física de la miopía nocturna, una serie de trabajos acerca de los ultrasonidos y su utilización terapéutica y el análisis dimensional.
Se interesó por la Biología en su entronque con la Física, fue nombrado director de la sección de Física del Instituto de Oncología de Lisboa (Portugal), labor que compaginó con sus tareas investigadoras y docentes en Madrid; participó como vocal de la Junta para Ampliación de Estudios; fue presidente de la Sociedad Española de Física y Química; miembro de la Real Academia Española con el discurso El lenguaje de la física y su peculiar filosofía, de la Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales y de la Real Academia de Medicina; correspondiente de la Real Academia de Ciencias y Artes de Barcelona y de las Academias de Ciencias de Zaragoza, Buenos Aires y Córdoba (Argentina), Lisboa y Coimbra (Portugal), Lima (Perú) y Puerto Rico (Estados Unidos). En 1967 fue nombrado rector del International Center for Mechanical Sciences, con sede en Trieste y en Udine (Italia). En 1969 se le concedió la medalla al Mérito en el Trabajo.
Algunas de sus obras de divulgación y didácticas son:
Física para médicos (1931), Mecánica física (1942), Termodinámica y constitución de la materia (1942), Electricidad y magnetismo (1945), De la Física a la Biología (1947), Análisis dimensional (1956).